La Cooperativa de Servicios Múltiples Cuenca del Jequetepeque se fundó en el año 2012. Al principio contaban con 200 asociados, pero algunos se desmotivaron en el camino y se fueron retirando poco a poco. Solo quedaron 68 personas que seguían creyendo en una visión compartida, pero que a la vez reconocían que era necesario aprender, para emprender.
Hace un año, a solicitud de los propios asociados, la Fundación Ayuda en Acción decidió apostar por este equipo de pequeños agricultores. Les brindó asesoramiento técnico para que todos apuesten por un mismo cultivo: la palta. El objetivo, a corto plazo, era alcanzar la exportación.
Antes los pequeños productores sembraban y vendían de forma tradicional, cada uno conseguía sus compradores, «intermediarios» que finalmente pagaban precios por debajo de su costo real, sin ninguna oportunidad de negociación.
Con el asesoramiento recibido, la cooperativa ha tomado un nuevo impulso. Tienen una misma visión y han comprobado lo que pueden hacer juntos. Por ejemplo, conseguir una cosecha de 33 toneladas de palta y una transacción comercial con una de las empresas líderes en el mercado agroexportador: Camet Trading.
Cada socio cultivó en su parcela un promedio de 530 kilos de palta hass, todo un logro para estos pequeños agricultores que nunca pensaron que sus productos llegarían a las mesas de hogares en diferentes partes del mundo, Europa, Estados Unidos y Asia.

«Estamos muy contentos de que alguien venga a apoyarnos y a dar seguimiento a nuestros campos, ya que de eso vivimos y lo importante es que nos sentimos fortalecidos porque en esta campaña de palta ellos nos enseñaron a negociar el precio y a registrar nuestras ventas, porque en un inicio ni siquiera sabíamos cuánto producía la chacra». Así nos narra y nos conmueve, Manuel Barrantes Ventura, agricultor de toda la vida que hoy a sus 50 años, ha comprobado que la unión hace la fuerza.