Trabajamos en reducir la vulnerabilidad de las personas y mejorar las condiciones de vida de las y los afectados frente a desastres o emergencias.
Atendemos a la población afectada frente a crisis humanitarias que busquen salvar vidas y recuperar los medios de subsistencia de las personas.
Reducimos los riesgos frente a desastres. Desarrollamos en alianza con autoridades competentes diagnósticos y planes de contingencia.
Desarrollamos capacidades de la sociedad civil y sus organizaciones para anticiparse y responder en caso de peligro.
personas mejoraron su capacidad de preparación y respuesta ante la ocurrencia de una emergencia o desastre.
personas con discapacidad están mejor preparadas debido a la existencia de planes inclusivos de gestión del riesgo de desastres en sus comunidades.
comunidades cuentan con un sistema integral operativo de gestión del riesgo articulado.
Durante el 2023, en respuesta a la emergencia del ciclón Yaku, más de 62.500 personas recibieron asistencia humanitaria para cubrir las necesidades más urgentes en relación a su situación de vulnerabilidad.
A través de proyectos de emergencia financiados por COSUDE, FAO, OIM y UNICEF se atendieron personas afectadas por las lluvias intensas; y por otro lado, con fondos propios y del BID, se instalaron sistemas comunitarios de alerta temprana en los departamentos de Lima, Apurímac y Cusco.