La selva peruana, tan prodigiosa, con el río más caudaloso del mundo, dueña de una exuberante vegetación y hábitat de miles de especies, es también el lugar donde enfermedades prevalentes afectan la salud de las personas, sobre todo las más vulnerables. Se estima que cada año, en la región Loreto, 40 niños y niñas -por cada 1.000 nacidos vivos- mueren antes de cumplir los cinco años de edad.
Además, el 52.4% de muertes en la infancia se atribuyen a infecciones respiratorias agudas, el 25.1% a deficiencias en la nutrición, el 7.1% a infecciones estomacales. Cifras muy superiores a los promedios nacionales, y donde la dispersión de la población obliga a acceder surcando ríos y caminando enormes trochas.
Es el caso de Indiana, uno de los nueve distritos que conforman la región Loreto. Poco más de diez mil personas viven ahí, más del 60% en comunidades o centros poblados rurales, con altos índices de pobreza, desnutrición y anemia, y por si fuera poco, propensa a sufrir inundaciones por fuerza del cambio climático.
En ese contexto, Ayuda en Acción en alianza con Caritas San José del Amazonas, decidió implementar un proyecto focalizado en ejecutar un Plan Comunitario de Salud, con miras a cambiar el enfoque, y pasar de la atención de enfermedades, a la prevención.
En busca de promotores de salud
Tres organizaciones trabajaron juntas con la meta de mejorar las condiciones de salud y ejecutar un Plan asentado en la prevención: Cáritas San José del Amazonas, la municipalidad distrital de Indiana y la red de salud pública local. El cuarto actor, y sin temor a equivocarnos, el más importante, había que buscarlo finamente. Se trata del promotor o promotora de salud, sin su rol todo esfuerzo por prevenir enfermedades caería en saco roto.
La estrategia fue buscar líderes en la comunidad con vocación de servicio, una suerte de querer encontrar a los “vecinos más solidarios de Indiana".
Para pasar el escollo, del factor económico y la distancia de los centros poblados, se consideró cubrir el valor del combustible empleado en el desplazamiento fluvial. Lo siguiente fue tocar puertas y motivar a la población a participar en las asambleas comunales para encontrar a los voluntarios y voluntarias que quisieran formar parte de la red de promotores de salud.
Como siempre pasa, cuando hay buena vibra, la respuesta de la gente no se hizo esperar. Se inició el programa con 116 personas, pero conforme fue avanzando la formación, llegaron otras más motivadas por lo que decían los participantes. La gente estaba deseosa de aprender, se realizaron 14 talleres vivenciales, y culminaron la preparación 158 promotores y promotoras de salud.
[caption id="attachment_27617" align="aligncenter" width="2560"] Ayudar a prevenir enfermedades en la infancia es una de las principales tareas de los promotores y promotoras de salud[/caption]
Estas personas ya están en la cancha resolviendo emergencias como picaduras de víboras, muy comunes en la zona y desplegando toda una estrategia de lucha contra la anemia y la desnutrición, dirigidos por personal calificado del sector salud.
Los promotores y promotoras de salud, cuentan además con un libro de medicina tradicional, para que mediante la gran farmacia arbolaria que ofrece la naturaleza, puedan brindar atención principalmente a grupos de riesgo, como son los niños, niñas, mujeres embarazadas, personas en condición de discapacidad y adultos mayores. #DíaMundialDeLaSalud #SomosAyuda
Luzdina te cuenta su rol para promover la salud y prevenir enfermedades
https://youtu.be/y_DrlRzJ0cg